CIUDAD GUAYANA, Venezuela- Una “Formación sobre Salud Sexual y Reproductiva y la Violencia de Género” fue realizada en el Estado Bolívar, en el marco del convenio de entendimiento entre la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Venezuela y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
Entre los participantes estuvieron la Sociedad Hebrea de Ayuda al Inmigrante (HIAS), Fundación RET -Protegiendo a través de la Educación-, Cruz Roja Seccional Caroní, Orgullo Guayana, Amnistía Internacional, Ateneo Ecológico del Orinoco, la Comisión para los Derechos Humanos y la Ciudadanía, la Defensoría del Pueblo y el Ministerio Público.
Este tipo de actividades busca darle continuidad a las acciones conjuntas para el fortalecimiento de la Red de Espacios Seguros del Estado Bolívar y respaldar el abordaje de temas relevantes para esta instancia, como la salud sexual y reproductiva, tomando en cuenta que el embarazo adolescente fue una de las problemáticas identificadas por las organizaciones activas en el entorno comunitario.
Según el trabajo adelantado hasta el momento en las zonas identificadas como prioritarias por ACNUR, la población refugiada está compuesta en su mayoría de mujeres solas jefas de hogar, quienes en promedio tienen de tres a cuatro hijos y viven en zonas rurales, donde en muchas ocasiones los servicios de salud son escasos o inexistentes.
La formación incluyó un marco teórico sobre la “Introducción al Paquete de Servicios Iniciales Mínimos (PSIM) para la Salud Reproductiva” y una explicación sobre la “Integración de acciones en Salud Sexual y Reproductiva y Violencia Basada en Género”, dictadas por el doctor Juan Pablo Protto, Consultor Regional de Asuntos Humanitarios del Fondo de Población de las Naciones Unidas, quien partiendo de su experiencia pudo ayudar a comprender a la audiencia por qué la salud sexual y reproductiva es parte integral del bienestar personal.
En este sentido abordó, además, la importancia de informar sobre los métodos de planificación familiar vinculados al ejercicio libre y seguro de la sexualidad, así como la necesidad de educación y atención del considerable índice de embarazos en adolescentes.
ACNUR facilitó una sesión práctica sobre los servicios de la Red de Espacios Seguros y la ampliación de éstos por parte de sus socios. De igual forma, junto a las organizaciones e instituciones públicas se discutió sobre los servicios de salud disponibles en Bolívar, limitaciones de personal médico especializado, ausencia de insumos médicos y medicamentos, necesidad de formación para los equipos de trabajo y oportunidades de cooperación con el Estado para optimizar la atención a las víctimas de violencia de género.
Gracias a esta formación fue posible ampliar los conocimientos técnicos y prácticos de los miembros de la Red de Espacios Seguros de Bolívar, la cual debe estar en capacidad de conocer los servicios de salud disponibles en las comunidades, la existencia o no de centros de salud que presten atención, y estar lista para establecer mecanismos de referencias seguros y confidenciales para los servicios. Esto permitirá, a su vez, ayudar a los sobrevivientes para que accedan a un servicio de salud que brinde protección y acercar los servicios de salud a las comunidades.